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El último juego, de J. D. Barker

J. D. Barker cosechó un merecido éxito a raíz de su trilogía El cuarto mono y  su trabajo posterior junto a James Patterson, Los crímenes de la carretera, que le convirtieron en uno de los autores de referencia dentro del thriller psicológico y policial. Con El último juego, Barker se mantiene en ese estatus, pero lo cierto es que este título, sin ser un mal libro en absoluto y habiéndome gustado, NO está a la misma altura que sus obras anteriores. 

El autor parece haber querido escribir el libreto de una serie de televisión para HBO o el de una peli palomitera, más que una novela al uso.  Y eso se nota cuando te enfrentas a un tocho considerable, de más de quinientas páginas, al que le sobra mucho material y se enreda sin necesidad, pero que se lee a toda leche gracias a sus capítulos cortos y un ritmo frenético, pese a que como digo, peca de exceso (en todos los sentidos) y le cuesta arrancar. Creo que esas son sus pegas, la extensión y el formato, sacrificando profundidad por espectáculo y pirotécnia.

Con todo, es una buena lectura y admito que tiene uno de esos finales de infarto que te dejan buen sabor de boca y hacen que el viaje haya valido la pena.

La Cría, de Pablo Rivero

Por Montse Roca Buj.

Sinopsis:

Ha desaparecido Lucas, el niño más famoso de España. Con más de un millón de seguidores en redes sociales, protagoniza un popular anuncio de galletas junto a Sweet Bunny, un enorme y enigmático conejo de peluche blanco.

Candela, una teniente de la Guardia Civil en plena crisis vital, toma las riendas del caso y comienza una trepidante cuenta atrás para determinar si se trata de un secuestro, un caso de violencia vicaria o si podría estar relacionado con los peligros del sharenting -la exposición de menores por parte de sus padres en internet-. En su búsqueda por resolver el misterio tendrá que sortear las intrusiones de Adriana, la madre del niño, y Judith, su hermana adolescente, ambas empeñadas en ser influencers de éxito.

La cría es una historia inquietante, turbia y aterradora. Un duelo desgarrador entre dos madres que crían a sus hijos de manera opuesta planteando un gran interrogante: ¿qué es más peligroso: la exposición en las redes o intentar mantenerlos al margen?Comienza la pesadilla.

Opinión:

Este es el tercer libro que leo de este escritor y si los dos primeros me gustaron este los supera. Es su cuarto libro publicado ( me falta leer el tercero).

Adriana es una madre cuyo único objetivo en la vida es vivir a costa de sus hijos mediante su exposición en las redes sociales. No siente el más mínimo amor por ellos solo le importa los likes que reciben sus publicaciones.

Primero lo intentó con su hija ( ahora una adolescente), y ahora vive de su hijo de tres años. Cuando este desaparece la policía encargada del caso ve muchas contradicciones en su declaración y empiezan a investigar para encontrar cuanto antes al pequeño.

Una historia llena de intrigas, secretos …conocer la historia de Judith, la hija, por lo que pasó siendo una niña y la madre consistió es muy duro, allí te das cuenta como es en realidad esa madre, fría,calculadora y sin sentimientos.

Por otra parte conocemos la historia de Candela, la policía encargada del caso.

Toca dos temas muy actuales, por un lado la exposición de menores en redes sociales, el daño que pueden hacen los padres a sus hijos contando cada minuto de su vida y otro tema que no voy a desvelar para no chafar la sorpresa de lo que va ocurriendo en la historia.

Me ha sorprendido las últimas 100 páginas, son un no parar de leer y como acaba la historia….me he quedado con la boca abierta. Menudo final!!!

Despiértame para verte morir, de Miguel Aguerralde.

Por Jorge Herrero.

Estamos ante una novela muy intensa, que te mantiene en tensión desde la primera página y que logra mantener al lector enganchado en todo momento. Despiértame para verte morir es una historia adictiva, que se lee del tirón, gracias al ritmo ágil con el que el autor ha sabido dotar a la trama, y también gracias a estilo de narración tan visual y cinematográfico como el que tiene esta novela, que ya es marca de la casa en la mayoría de las obras de Miguel Aguerralde.

El autor ha sabido crear una historia que bebe mucho de la novela negra (género donde se mueve como pez en el agua), pero también ha sabido integrar en la trama elementos del thriller y unas cuantas pinceladas de terror. Todo ello mezclado da como resultado algo como esta obra, que hace que sus poco más de 250 páginas supongan para el lector toda una experiencia plagada de acción, tensión, de momentos muy impactantes, donde al autor no le tiembla el pulso a la hora de contar, con todo lujo de detalles, los horribles crímenes que se irán sucediendo a lo largo de la novela, en especial a partir de la segunda mitad de la historia.

Los personajes están bien desarrollados y perfilados, desde el principal, Marcus Crane hasta los secundarios. Todos y cada uno de ellos tienen entidad y personalidad propias.

Aunque la historia que se cuenta en Despiértame para verte morir no es la más original del mundo, cosa harto difícil ya que todo (o casi todo) está inventado, el autor sabe dotarle con la suficiente personalidad y de su estilo propio, para salir muy bien parado. Aguerralde sabe apropiarse muy bien de los elementos clásicos de la novela negra para crear una trama que no te deja soltar en ningún momento el libro hasta acabarlo. Y solo me queda hablar del desenlace, un final que siendo sincero, me ha encantado, me ha dejado muy buen sabor de boca y está a la altura del resto de la novela. Demostrando que no hace falta ser el más innovador ni inventar la pólvora para hacer que el lector queda atrapado y se sumerja en las páginas de Despiértame para verte morir. Estamos ante una lectura adictiva, llena de grandes momentos, que hacen que esta novela no tenga que envidiar para nada a los títulos que nos llegan de autores internacionales.

En definitiva, esta obra es absolutamente recomendable para todos los amantes de la novela negra, y para todo aquel que disfrute de las buenas historias. Entretenida en todo momento. Otra prueba del buen hacer de Miguel Aguerralde, un autor que es siempre garantía de calidad, como demuestra su amplia trayectoria, con un buen puñado de novelas y de relatos en su haber.

Sinopsis:

Richie Santoro terminó sus días en la silla eléctrica jurando venganza contra el abogado que logró su condena. Todos decían que lo que había hecho a esa niña no tenía perdón de Dios.

Han pasado dos años y el entonces abogado Marcus Crane ha dejado de ejercer. Vive atormentado por la crueldad y la inmundicia con la que tuvo que lidiar al hacerse cargo del caso Santoro.

Ahora que se cumple la efeméride, una ola de crímenes parece cebarse con los allegados de Crane, obligándole a contemplar las imágenes de cada uno de los asesinatos. Asesinatos que llevan la peculiar firma de un viejo conocido.

Nunca debió aceptar ese caso.

Nunca debió llegar a la obsesión.


El silencio de la ciudad blanca, de Eva G. Sáenz De Urturi

Por Soraya Murillo.

Este es el primer tomo de la llamada “Trilogía de la ciudad blanca”. Si he de ser sincera tenía muchas dudas de empezar esta saga. Por ambientación me recordaba a la trilogía del Batzán, de la que no quedé muy contenta. Pero la novela empezaba con buen pulso narrativo y se me hizo amena la lectura. Algo muy importante a su favor es que es autoconclusiva.

Una escritora que da muchos detalles, haciendo con ello que el libro se vuelva muy visual. Escrita de forma sencilla, nos adentra en una novela negra donde no faltan referencias a la mitología, las leyendas o a la arqueología. Algunas leyendas son verdaderamente hermosas, con un punto de magia y terror.

Parte importante de la historia trascurre en la provincia de Álava y la ciudad de Vitoria. Sus calles, monumentos y bares, son lugares que existen, haciendo que todo parezca más real. La autora mueve con astucia al protagonista principal, el inspector Unai López de Ayala, alias Kraken, experto en perfiles criminales. Un hombre cuyos demonios interiores no logra exorcizar.

En Vitoria, hace dos décadas, un brillante arqueólogo fue detenido por unos asesinatos rituales. A punto de salir de su condena los asesinatos se reanudan tal y como fueron cometidos. Si el supuesto asesino sigue en la cárcel, ¿quién los está matando? Ese será el reto de Unai. El escenario lo será todo en esta novela. Es lo que siempre digo: nada supera a un autor describiendo el lugar donde vive. Tendremos unos saltos en el tiempo, con otra historia paralela a la del protagonista y con otros personajes, aunque obviamente tendrá mucho que ver con la actual. Y eso es curioso, pues en sí parece una simple historia de amor.

La forma de matar es muy especial, rozando la mitología. La novela se hizo para entretener al lector, esto lo digo porque algunas puestas en escena de los crímenes resultan bastante inverosímiles, serían prácticamente imposibles de realizar en plena calle sin que nadie viera nada, ya que también el escenario abarcará una ciudad en fiestas, y dudo que algo así pudiera hacerse sin ser visto, sin testigos. No le deis muchas vueltas, la autora es consciente de ello, pasando por encima como no queriendo dar más explicaciones.

Nuestro policía es muy inteligente, sigue buenas pistas. Aun así, el lector llegará a la misma conclusión, incluso en algunos tramos se adelantará al propio policía por las pistas que dejó la autora. Por eso pienso que es una novela en la que la escritora ha querido que los protagonistas y los lectores se unan y vivan por igual la trama, buscando los porqués.

Un thriller de muy buen ritmo para los lectores amantes del misterio y la novela policial, donde el inspector de policía prácticamente arrolla con su personalidad al resto de personajes. Una ciudad llena de rincones misteriosos que un asesino empapará con sangre. El sacamantecas, Ochate, mitos vascos, cultura, todo le vale a Eva G. Sáenz de Urturi para que no perdáis interés, destacando un magnífico trabajo de investigación.

Historia que seguirá con “Los ritos del agua “y “Los señores del tiempo.

Entretenida sin más. Un final demasiado fantasioso, creo que se le fue un poco la mano huyendo de lo real, queriendo dejar una atmósfera tan misteriosa. En los crímenes en serie hace falta un poco más de seriedad. Mentiras y venganzas se unirán, junto a un pasado que alguien no quiere ni desea olvidar.

 

https://www.casadellibro.com/libro-el-silencio-de-la-ciudad-blanca/9788408154167/2933371

 

 

 

 

 

 

Noches de sal, de David Mateo.

Por Soraya Murillo.

Dicen que cada historia comienza como si fuera el fulgor de un fuego que nace. Depende del autor que ese resquicio de luz y calor se transforme en la llama que llegue al lector, logrando que al prender venza la oscuridad, dándole la fuerza para superar y llegar a nuestra monótona realidad. David lo logró y la novela impregnará vuestra mente. Estamos ante un escritor de talento consumado en el manejo de los personajes y las tramas, desarrollando la obra en dos escenarios temporales completamente distintos sin que disienta de la calidad de la obra. Su forma de escribir precisa y llena de detalles nos lleva de un tiempo a otro sin sobresaltos.

Todos los libros se escribieron con el fin de llegar a ser leídos, pero solo los realmente buenos son merecedores para que otros lectores os hablen de ellos. Me toca a mí como lectora hacerlo con Noches de sal.

Todo comienza con el juego de unas niñas, contando historias de miedo en la vivienda de una urbanización de El Grau de Moncofa (Castellón). Aurora es especial, sabe cómo asustar de verdad. Su abuelo ya le contaba historias fantásticas. Esa noche utiliza un espejo para llamar aquello que nunca hay que pronunciar, abrir puertas que deben seguir cerradas.

El tiempo avanza. Aurora, ya una chica joven, deja su ensimismamiento al conocer a Abel, un ilustrador que un día quedó hechizado por un relato corto que debía ilustrar. Tan cautivado, que la buscó para averiguar quién poseía el alma, pura o atormentada, oculta detrás de esas palabras.

Años más tarde, en la ciudad de Valencia, un asesino en serie apodado Pilatos, mata de forma espantosa, tanto que más que un asesino podremos catalogarlo de verdadero monstruo. El inspector Miguel Manchón intentará darle caza, mientras unas extrañas pintadas dejan leer: «Sabes dónde están los Nocturnos´´

Terror, thriller, novela negra, misterio, policíaca, con una historia de amor de fondo. Noches de sal ogra ser original en un género mestizo donde mezcla un poco de todo, con el mundo sobrenatural junto a crímenes de asesino en serie. Con dos escenarios muy bien diferenciados, el pasado (las vidas de Abel y Aurora, con las historias del abuelo de ella que nos recordara un mundo de libros antiguos, con esa Valencia de Guillén de Castro y adentrándonos en lo que fue parte de la cultura literaria valenciana en el Siglo de Oro) y al presente (con el asesino actuando).

No tengo ninguna duda que la novela gustará, pues es de esa clase de libros cuya historia se adhieren al lector, aunque hayan pasado días de su lectura. Unas protagonistas femeninas muy diferenciadas, una de ellas casi fantasmagórica, pálida con una belleza que traspasó el límite del tiempo.

David Mateo nos quiere hacer entender que hay cosas raras, ocultas. La novela trata en cierta forma sobre su particular visión de esos » límites» de la realidad, por parte de los protagonistas. Toda la trama se va trenzando y al final, se consigue una obra bien cerrada, que resuelve todas las dudas del lector conforme avanza en la historia. Nos demostrará con esta novela que se puede escribir una gran historia en una ciudad española, con personajes españoles, con una prosa digna de los más grandes escritores. No le tiembla el pulso al pasar de estar describiendo un hermoso amanecer en el Mediterráneo a mostrar, sin tapujos, la forma de morir más horrible inventada por un asesino en serie. Los detalles que usa en muchas escenas despertarán en nosotros miedos que creíamos dormidos. El entramado gira cuidadosamente en un cierre satisfactorio, pudiendo digerir cómodamente su propio ritmo y el de los acontecimientos que nos llevan a él.

Incluso cuando la verdadera oscuridad de la noche es vencida por la iluminación eléctrica en cualquier ciudad, Valencia parecerá un lugar irreconocible, pese a la luz. Leeremos nombres de calles, lugares cerca del mar, pero la percepción que tendremos fue que se distorsionada de la realidad. No es esa ciudad alegre que yo conozco. Aquí en la novela, es como si se hubiera apoderado de ella algo siniestro, que hace que sus calles parezcan pequeñas, cerradas, sintiéndote intranquilo, esperando que surja cualquier cosa nauseabunda que te lleve a la locura.

El pasado siempre regresa y aunque saber quién es el asesino será lo principal, nosotros buscamos los porqués, el origen de todo. Y mientras los pálidos siguen entonando cantos fúnebres, David Mateo hará gala de cómo se debe dejar escrito un libro, páginas enteras para aplaudir.

Los buenos escritores siempre están observando y recopilando experiencias. Una mañana silenciosa, sin incidentes, para un escritor es una mañana llena de augurios y pensamientos. Comenta el prólogo del libro que David, en otra época, hubiera sido un gran contador de historias. Desde luego, sin ninguna duda, puedo decir que sabe escribirlas. En el breve espacio de tiempo que ocupé leyendo este libro, disfruté de un magnífico escritor. Nada más que comentar, salvo recomendaros el libro por historia, pero sobre todo por calidad literaria, de esa que los lectores buscamos entre títulos y nombres y no siempre encontramos.

https://kelonia-editorial.com/Tienda/home/55-noches-de-sal-david-mateo-edici%C3%B3n-r%C3%BAstica.html  

 

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Perros y lobos, de Hervé Le Corre (Reservoir Books)

Buenas tardes, mis queridos Lectores Ausentes.

Hoy os voy a hablar de Perros y lobos, de Hervé Le Corre, un autor francés especializado en novela negra al que no conocía, pero del que me habían hablado muy bien.

Franck sale de la cárcel tras cumplir condena, no quiso delatar a su cómplice en un atraco: Fabien, su hermano mayor. Lo acoge en su casa Jessica, la novia de Fabien, esperan su regreso de España, adonde fue a cerrar un negocio. Pero el lugar al que llega Franck es una asfixiante vivienda que debe compartir con la familia de Jessica y un perro amenazador.

Entre los pinos de las Landas de Gascuña, lejos de Burdeos, el verano trae un calor denso, húmedo y malsano que despierta los más bajos instintos. Además, una banda violenta hostiga a Jessica y su familia. Cuando salgan a la luz los motivos reales de la ausencia de su hermano, Franck dejará de una vez por todas su disfraz de perro dócil y se convertirá en un lobo despiadado.

La verdad es que las referencias eran ciertas y que ha sido una buena lectura, aunque aclaro también que en cierta medida, varias de ellas exageraban al respecto. Y es que la novela que nos ocupa, a nivel argumental, no sorprende y la historia que nos cuenta  (siempre con matices), nos resulta familiar y sin llegar a resultar predecible, si intuimos que las cosas pueden ir en tal dirección.

Dejando este aspecto a un lado, hay dos puntos en los que la obra si destaca y el principal de ellos es en la ambientación y la atmósfera malsana que logra crear. Asfixiante, opresiva de un modo angustioso, claustrofóbica, en un escenario que tiene tanto peso en la trama que se convierte en una suerte de personaje más e influye de tal forma en el ánimo (del protagonista y del propio lector), que uno se siente agobiado, atrapado en una trampa, en una jaula sin barrotes, pero que nota a su alrededor, cercándolo y condenando su futuro. El calor, las moscas, el tedio. La casa misma no es un hogar, solo un refugio en el que se cobijan las alimañas, un edificio decadente, rodeado de neumáticos viejos y chatarra. La caravana, una celda con vistas, donde el protagonista se resguarda tras unos milímetros de chapa bajo el sol abrasador. Lo cotidiano convertido en pesadilla, que se repite. El silencio, aterrador, como preámbulo de desdicha. El tiempo no pasa. Todo languidece. El ánimo, las fuerzas, la paciencia…

El otro punto a resaltar es la creación de los personajes. Hervé hace aquí un trabajo magnífico, retratando a cada uno de los miembros de esta familia disfuncional de manera magistral. Lo vulgar, lo marginal, lo cruel…Todo ello, en principio, disfrazado de falsa normalidad, que se cae a pedazos en el momento que uno se fija en las costuras y los remiendos, descubriendo lo que hay debajo. El Viejo, un zorro, charlatán,  y siempre con sus chanchullos, alguien mediocre en el sentido más ofensivo del término, metido en trapicheos y buscando siempre sacar algo de provecho. La madre, una arpía alcohólica, resentida con todos, amargada y resignada a ser quien es y vivir como vive, buscando herir para sentirse viva. Jéssica, la hija de ambos, una serpiente. Seductora, caprichosa, pecado y lujuria. Locura y desfase, drogas, sexo y alcohol. Desequilibrada, manipuladora en extremo y con tendencias autodestructivas. Cualquier método es bueno por salir del infierno, sea cual sea el precio a pagar, aunque sea el condenarse a si misma. Escapar, huir hacia ninguna parte, hacia ningún lugar, pues ella misma es parte implícita de ese averno y lo lleva consigo allá donde va.

Una familia en la que todos son culpables, ruines y mezquinos, en el que no hay lugar para el amor, el cariño ni nada que no sea los intereses de cada uno, pero condenados a permanecer juntos, a soportarse a duras penas, a seguir en esa mentira de la que no saben como escapar. Violencia, impulsos, ambiciones y traición.

Rachel, la niña muda, rara y extravagante, una flor en el estercolero, sumida en su propio mundo, utilizando esa especie de autismo como coraza ante la inmundicia que la rodea. El hermetismo para suplir el afecto, para paliar los episodios de furia de su madre, el abandono y el desapego. Su aparente fragilidad no es tal, hay fortaleza en ella, hay valentía en su corazón, aunque sea evadiéndose de la realidad.

Y el perro. Ese can negro. La mascota que no es tal, traicionera, astuta, que deambula por la propiedad. De alguna forma, es el propio reflejo de la familia que la acoge. Siempre vigilante, con esa mirada que denota inteligencia y maldad.

El perro no siempre es el mejor amigo del hombre. Ni el lobo logra siempre comerse a Caperucita, sobre todo si esta resulta ser más feroz que él, más cruel y ladina.

Creo que estas dos frases resumen el libro a la perfección. Así que poco más puedo añadir a esta reseña. En todo caso, solo recomendaros que le echéis un ojo, porque de verdad que vale la pena.

Lo pasaréis mal. Sentiréis el agobio, la angustia, la opresión que siente el protagonista, cuando esa calma chicha se convierta en vuestro día a día. Cuando el calor y las moscas os hagan resoplar. Cuando el sudor empañe vuestra vista y os preguntéis que coño hacéis aquí, en esta espera eterna, en medio de ninguna parte. Y cuando descubráis la verdad, lamentaréis no haber mordido la mano que os daba de comer.

https://www.casadellibro.com/libro-perros-y-lobos/9788417125578/6409486

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En silencio, de Marin Ledun (Off Versátil)

Buenos días, mis queridos Lectores Ausentes.

Hoy venimos con un thriller que me ha dejado muy buen sabor de boca por su particular forma de tocar el género. Personal, en ocasiones tan intimista, que la historia que nos cuenta queda relegada a un segundo plano y lo que de verdad destaca es el tratamiento de la naturaleza humana y de la psicología de los personajes, de lo que sienten, de aquello que les empuja a actuar y comportarse como lo hacen, hasta el punto de que pese a mantener todos los elementos de una novela que encaja en lo de negra y criminal, yo la definiría, según las impresiones que me ha ido dejando durante su lectura, como un drama. Si, tal cuál. La fatalidad es una hija de perra que se cruza en nuestro camino de la forma más absurda y cuando eso sucede, sus consecuencias son imprevisibles. Cuando tu vida se derrumba, cuando has tocado fondo y no queda rastro de quien un día fuiste, cuando ya no tienes nada que perder, resulta imposible saber a donde te llevarán tus actos y cuáles serán sus consecuencias.

Admito que no había leído nada de Marin Ledun, y que fue esa sugerente y fantástica portada la que, junto a la breve sinopsis del libro, lo que me llamó la atención y ganas de hacerme con él. Una vez terminada su lectura, solo puedo decir que, pese a un apunte que mencionaré más tarde, me alegro de haberlo hecho, pues ha sido todo un descubrimiento. En él, se manifiesta de pleno La Gran Triada: Culpa, Castigo y Redención, algo que ya sabéis que me fascina, pues es uno de mis temas favoritos.

En Silencio, curioso título para una novela en la que el autor nos habla de un tema tan viejo como el mundo. La Venganza. En este caso, esta se manifiesta de forma violenta, no tanto a nivel físico como una vulgar vendetta a sangre y fuego (que también), sino de una forma retorcida, haciendo hincapié en el trauma psicológico de la estrella de esta función, Émilie, en su estado mental y en ese juego macabro y a ratos, absurdo, que se convierte en un vis a vis entre los protagonistas, un careo existencial a puerta cerrada en un escenario acorde para la ocasión, tan deprimente y desastrado que representa a la perfección su propia existencia. Una perrera, donde los animales gimen, ladran, muerden y se pelean, abandonados a su suerte. Un ambiente sórdido y decadente que refleja la propia condición humana de los personajes, enjaulados, cada uno a su manera, y enseñando los dientes, asustados y lanzando dentelladas como única defensa ante el miedo, confinados en una jaula que ellos mismos se han creado a medida.

Somos muchos los que pensamos que en ocasiones, cuando ocurren ciertas cosas, solo nos queda saldar cuentas, puro Talión. Ojo por ojo, diente por diente, que al resarcirnos encontraremos la paz. Para otros es todo lo contrario: la venganza no solo no cambiará nada, sino que nos cargará con una losa que arrastraremos para siempre, creando un vacío en nuestro interior que jamás seremos capaces de volver a llenar. Y es que la cuestión que se nos plantea la novela es trascendental: ¿Existe siempre un culpable o somos nosotros quienes decidimos que así sea?

Émilie es una joven que lo tenía todo. Vivía su vida como siempre había querido. Un presente maravilloso y un futuro todavía más prometedor. Ahora, es una discapacitada, alguien que depende de una prótesis para poder caminar, como resultado de un accidente de tráfico. Rota, hundida, ve como todo su mundo se desmorona. Su caída al infierno es absoluta. Se ahoga en un pozo de mierda existencial y cuando toca fondo, solo queda algo que la empuje a seguir viviendo: Ver arder el mundo.

Cegada por la amargura, Émilie necesita encontrar un culpable. En realidad, no es más que la búsqueda desesperada de hallar un motivo, de una explicación que responda a la gran pregunta:¿Por qué a mí? Una justificación, una razón. Algo a lo que poder exigir cuentas.
Ledun se vale de esta premisa para interrogar al lector: ¿hasta dónde seríamos capaces de llegar en un caso así, cuando nuestra vida cambia de una forma tan terrible e irreparable?
El autor, sin apenas esfuerzo, va tensando la cuerda, dándonos información sin prisas, generando de forma en apariencia sencilla, una sensación de asfixia, a medida que vamos conociendo a Émilie, quien se va descubriendo como alguien muy distinta a la idea preconcebida que teníamos de ella al principio. Una víctima, si. Pero no del modo que pensamos. Alguien ofuscado, incapaz de razonar, con tendencias autodestructivas, obsesionada por saldar deudas y terminar con todo de una vez, sea cual sea el precio a pagar.
Utilizando con gran acierto sus herramientas, el autor nos habla sobre la soledad, la derrota, la angustia, el miedo y la ira… La depresión, la autocompasión, la incapacidad de aceptar los hechos, ni la culpa. Una culpa que nos corroe por dentro, pero que necesitamos exorcizar, sacar fuera, ponerle un rostro. Encontrar contra quien dirigir nuestra rabia, nuestro odio, nuestra impotencia. Cuando nos golpea la tragedia, necesitamos un culpable sobre quien descargar todo el dolor y frustración que se aloja en nuestros corazones. No podemos señalar a Dios ni al Destino como los causantes de nuestra desgracia, ya que ellos hacen oídos sordos a nuestros gritos y lágrimas. Libre albedrío, ser consecuentes con nuestros actos: Una putada, vamos.

Ese dolor se convierte en furia y esta, en obsesión. Rabia contra todo y contra todos, incluso contra nosotros mismos. Debe haber un responsable, alguien a quien acusar, a quien hacerle pagar. Contra quien clamar venganza y ver derrotado, purgando sus pecados y pidiendo clemencia. El castigo que queremos infligir, vomitar sobre él lo que llevamos dentro, ese fuego que nos enloquece y con el que quisiéramos arrasar con todo, incluido el propio mundo. No sabemos si será suficiente, si servirá de algo, pero es lo único que nos queda. Lo mismo sucede con el perdón, una palabra que nos viene grande, que no somos capaces de contemplar, que no tiene cabida porque nos deja desarmados, sin argumentos, echando abajo todos nuestros planteamientos y a la que tememos, porque es sinónimo de nuestros propios errores, de nuestra debilidad, de la derrota que supone comprender que hagamos lo que hagamos, nada cambiará nuestra situación, ni nos devolverá nuestras vidas, ni nuestro pasado. Y por último, la redención, una quimera que no queremos alimentar por que nos parece imposible, fuera de lugar, pero que en secreto ansiamos sobre todas las cosas. Negamos con lágrimas en los ojos, confusos, perdidos y desorientados, pero esa necesidad palpita en nuestro interior, un deseo inconfesable de aferrarnos a algo que nos salve de nuestra propia destrucción, ser capaces de sobreponernos, de aceptar lo ocurrido, de ser honestos con nosotros mismos y de abrir un resquicio de luz que nos permita seguir adelante con nuestra vida, por dura que nos resulte y por mucho temor que sintamos ante lo que nos depare el futuro. De vivir con ello.

Una pequeña joyita, más que recomendable, aún con sus defectos. Brillante, hermosa, aunque imperfecta, al menos en su desenlace. El cierre , aunque correcto y comprensible (y no digo que no sea acertado), me ha parecido flojo. Se queda en tierra de nadie, no se decanta ni se atreve, ni para bien ni para mal. Y a mi entender, lo que necesitaba la obra al finalizar era justo eso, uno de los dos extremos, sin medias tintas.
Salvo ese detalle, que como siempre digo es una simple observación personal según mi propio criterio y gustos, considero que es una novela muy, muy interesante y que deberíais tener en cuenta. Si queréis algo más que un simple thriller o una historia de venganza al uso, con esto disfrutaréis, os lo aseguro.

Echadle un tiento y ya me contaréis.

En silencio

Marin Ledun

Off Versatil

https://www.casadellibro.com/libro-en-silencio/9788494819155/6445798

 

 

 

 

Dark, de Baran bo Odar y Jantje Friese, de lo más recomendable de Netflix

Por Loren Lumiére López.

¿Alguien está viendo o ha visto Dark, la nueva serie de producción alemana emitida por Netflix? Tras verla, en mi caso tengo que decir que me ha gustando bastante. He leído por ahí que la comparan con ‘Stranger Things’ y no puedo estar para nada de acuerdo, salvo alguna cosa concreta que tiene en común. Son series con intenciones y trasfondo totalmente distinto.

Para empezar, Dark se aleja mucho del tono buenrollero de Stranger Things; es mucho más fría, sórdida y adulta en su conjunto, y porqué no decirlo, también en su guión y personajes (no digo que sea mejor o peor, solo que es muy distinta).

La serie maneja el suspense bastante bien y es mejor verla sin saber nada de ella. A destacar su ambientación, (que me parece muy particular y crea buena atmósfera), y el guión, que es muy bueno, el como se va hilvanando todo, y pese a que nos podemos oler la tostada en el capítulo 3 o 4, realmente la serie no va de «quién«, sino de «cómo» y «cuando» (como reza una de sus frases promocionales). Y ahí es donde Dark saca todo su potencial. Como punto negativo reconozco que en algunos tramos, llegando al final de la temporada, tanta información de los diferentes personajes y sus respectivos acontecimientos me llegaron a confundir y hacer que me perdiera un poco. No sé si será cosa mía, que soy muy torpe o quizás no está del todo bien explicado debido a la «densidad» de información, algo confusa a veces, aunque la serie hace todo lo posible por explicarlo (supongo que son conscientes de ello).

Más allá de su argumento me ha gustado mucho también la construcción (y deconstrucción) de los personajes. Aquí no tenemos buenos muy buenos o malos muy malos, son gente digamos gris, con sus virtudes, sus secretos y defectos, lo que los hace digamos más cercanos, pese a que por ello puedan crear a veces cierta antipatía; pero creo que es una virtud en este caso, sobre todo cuando ves la evolución de los mismos a lo largo de la temporada.

Hablar de cualquier otra cosa de ‘Dark’ sería rozar el spoiler, pero creo que es una buena serie, buena trama, curiosos personajes, bien llevada y bastante adictiva con un puntito «original» o digamos más «exótico» alejando del tono USA. El tema central por el que gira la serie me apasiona, da mucha chicha y creo que lo han explotado bastante bien.

Muy buena serie, muy recomendable.

 

El archivo de atrocidades, de Charles Stross (Insólita Editorial, 2017)

Una reseña de FJ Arcos Serrano

 

arat1Bob Howard es un geek reclutado a su pesar para trabajar en la Lavandería, una agencia ultrasecreta del gobierno británico encargada de proteger nuestro mundo de todo tipo de seres de pesadilla. Mientras sus compañeros se juegan la vida a diario enfrentándose a horrores innombrables, Bob se dedica al mantenimiento de los sistemas informáticos.

Hasta que un día consigue un ascenso. En su nuevo puesto, además de lidiar con interminables reuniones de trabajo y montones de papeleo, Bob tendrá que tratar con nazis interdimensionales, terroristas, universos alternativos y antiguos horrores lovecraftianos para evitar el fin del mundo.

Insólita se presenta en el mundo editorial con la publicación de El Archivo de Atrocidades, una novela escrita por Charles Stross, ganador del Premio Hugo por el relato corto La Jungla de Cemento, el cual viene incluido como extra  en esta estupenda edición que hoy os presento por aquí­.

A pesar del intento por parte de diferentes editoriales de traernos algunas novelas de este autor, tengo el pálpito de que con esta nueva ocasión por parte de Insólita vamos a tener Stross para rato…

Estamos ante una trama de difí­cil encasillamiento, ya que podrí­amos decir de ella que bebe tanto de Lovecraft como de la fantasía urbana de corte hard, todo ello aderezado con un sentido del humor que le sienta de maravilla al producto final.

arat2El elenco de protagonistas es lo suficientemente atractivo como para estar continuamente interesado en sus combates cotidianos (de hecho me ha recordado en no pocas ocasiones a la serie de TV The IT Crowd), resultando de todo ello una lectura muy amena y que provoca una sonrisa cómplice en algunos de sus descacharrantes pasajes debido a la visión tan cí­nica de nuestro personaje principal.

La parte de la historia oculta (con ramificaciones que llegan hasta nuestros días) que se nos presenta tira más del thriller de espionaje y es aquí, quizás, donde el escritor apabulla con conceptos técnicos que pueden provocar en el lector cierta confusión si no estás muy metido en el tema del código binario y/o altas tecnologías.

En definitiva: una historia que a primera vista puede resultar un tanto rara, chocante y enloquecida, pero una vez inmersa en ella es muy fácil dejarse llevar por el estilo y el ritmo tan característico que le imprime el escritor. Es más… ¿dónde más vais a encontrar a un personaje que se hace llamar a sí­ mismo demonólogo computacional?

Muy recomendable si lo que buscáis es una lectura diferente y divertida.

 

Ficha técnica

Tí­tulo: El archivo de atrocidades

Autor: Charles Stross

Editorial: Insólita

Páginas: 416

ISBN: 978-84-947020-0-6

Precio: 22.95 euros

 

FARISHTA, de Marc Pastor (Catedral, 2017)

Una reseña de FJ Arcos Serrano

 

far1Farishta es una niña huérfana afgana, adoptada por un militar ruso en los años 80 que, en la adolescencia, pierde de nuevo a sus padres en un accidente de avión. Se instala en París hasta que le ofrecen un trabajo en el complejo Sánnikov, una especie de resort turístico en las islas Clarke de la Polinesia Francesa, consistente en atender las necesidades de las familias alojadas allí, cada una en una pequeña isla. Con el joven Manse Melville, el guía del complejo, vive una apasionada historia de amor (y sexo), y al mismo tiempo se adentra en los misterios que encierra el lugar. ¿Por qué esas familias están viviendo allí, apartadas del mundo? ¿Qué les ocurrió a las chicas que la precedieron en su puesto? ¿Qué es la empresa Yefremov-Strugatski? Farishta no sabe en quién confiar y menos aún cuando nota una presencia en los alrededores de su cabaña. Alguien la acecha.

Marc Pastor nos presenta su quinta novela llamada Farishta (publicada de forma simultánea en catalán y en castellano), título que vuelve a posicionar al escritor en un punto privilegiado dentro de la literatura catalana.

Me consta que la publicación de esta novela ha sido un acontecimiento mediático en Catalunya: Numerosos medios como la televisión o la prensa más generalista se han hecho eco del nacimiento de Farishta, así que sobra decir que Pastor es actualmente el escritor de ciencia ficción en catalán más importante de los últimos años.

Tengo que admitir que es la primera novela que leo del autor, pero ha sido tan buena mi experiencia personal con ella, que en cuanto pueda me lanzaré a leer sus cuatro novelas anteriores, de las que he leído auténticas maravillas.

Farishta se nos presenta en forma de diario personal a través del cual conoceremos cada vez mejor a nuestra protagonista femenina mediante entradas donde temas como la música, las relaciones familiares, el amor, la pasión o la tristeza, llenan su día a día, convirtiéndonos de esta manera en voyeurs de su día a día.

La narración cuenta además con información complementaria en forma de mapas, partes médicos, fotografías, informes forenses, transcripciones sonoras e incluso postales, mostrando así una ambiciosa estructura narrativa que casa a las mil maravillas con la compleja trama que aquí nos presenta el escritor catalán.

Tengo que admitir que el personaje de Farishta me ha encandilado desde las primeras páginas, ya que tiene ese puntito de ingenuidad y esa forma tan especial de ver el mundo que le rodea que es imposible no sentir interés por todo lo que le pasa.

Podemos afirmar que la novela se vertebra en dos partes bien diferenciadas, aumentando su ritmo a partir de su segunda mitad, en la cual nos encontraremos varios misterios con su consabida buena dosis de intriga y tensión, hasta llegar así a su explosivo final.

Queda claro, por otra parte, que Marc Pastor es una esponja humana de conocimientos, ya que salpica la narración con una variedad de guiños a series de televisión y música demostrando de esta forma que es un serieadicto/melómano de manual.

Un consejo: Hay que dejarse llevar por la historia que nos narra el escritor, ya que así se disfruta mucho mejor esta aventura de viajes en el tiempo enclavada a su vez en un universo propio (como si Damon Lindelof –el guionista de la serie ‘Lost’-, supiera de verdad a dónde quiere llevarnos).

far3Para ir finalizando me ha pasado una cosa curiosa con la resolución del libro, ya que cuando pensaba que iba a acabar de una forma determinada, Marc Pastor te planta en tus narices SU final, dejándote un poco desencajado; Repito: no es un mal final en absoluto, es sinceramente otro punto de vista diferente que igualmente es válido dentro de la plétora de posibilidades que el autor ha ido cociendo poco a poco en estas páginas.

En definitiva: Farishta es una novela de ciencia ficción con su buena dosis de thriller y aventuras que lo tiene todo para poder triunfar, tratando de igual forma reflexiones y temas universales (como el encontrarse a sí mismo, la soledad o el desarraigo…), cuestiones que cualquier lector puede interiorizar a su manera.

 

Ficha técnica

Título: Farishta

Autor: Marc Pastor

Editorial: Catedral

Páginas: 544

ISBN: 9788416673339

Precio: 20,50 euros